Se acercan fechas de mucho regalar, y seguro que todos tenéis un hijo, un primo o un sobrino al que queréis sorprender con algo muy original. Yo tengo un ahijado que quiero que salga de lo más musical y por eso me he propuesto empezar a estimular sus lindas orejitas (y la de sus papis) con el traqueteo de unas baquetas muy «handmade».
Así que como es un gordito y no para de tragar su madre me trajo el otro día toda una colección de latas bajo la excusa de «tú que eres muy manitas a ver si las puedes reciclar». Y una semanita dándole vueltas al coco han dado como resultado este juguete tambor que hoy os cuento para que probéis en casa.